Los humatos se presentan en diversas formas líquidas y secas y pueden aplicarse en cualquier fase del crecimiento del cultivo.
Puedes aplicarlos con semillas, fertilizantes secos o líquidos, en surcos, como pulverizaciones foliares o junto con aplicaciones de pesticidas.
Para obtener los mejores resultados, se recomienda aplicar los humatos crudos en otoño, para darles tiempo a descomponerse en humus antes de la siguiente temporada de cultivo.