El método colorimétrico, también conocido como método espectrofotométrico, es una técnica muy utilizada para determinar la concentración de ácidos húmicos (AH) en una muestra. Aunque es uno de los métodos más antiguos, no es el más exacto porque sus resultados pueden verse fácilmente afectados por la contaminación.
La prueba colorimétrica no es exacta porque se basa en medir la absorbancia de la luz por el extracto de la muestra de AH a una longitud de onda específica y compara el valor con el de un patrón de concentración conocida. Sin embargo, también puede detectar ácidos fúlvicos y posiblemente otras sustancias, lo que da lugar a valores de concentración de AH inflados. Además, pueden añadirse adulterantes como la melaza, que absorben la luz a la longitud de onda de la prueba, para producir concentraciones de AH artificialmente elevadas.
Además, el patrón de AH que se utiliza durante el proceso, como el AH de la empresa química Sigma u otro patrón, puede no representar con exactitud la composición química del AH de todas las fuentes. Esta posible tergiversación contribuye aún más a obtener resultados artificialmente inflados e inexactos al utilizar el método colorimétrico.