Los sistemas municipales de tratamiento de aguas residuales tienen que ser flexibles. Los caudales y los contaminantes cambian constantemente, y el operador tiene que estar preparado para cualquier cosa que se le presente. La estabilidad operativa depende de que se controle y comprenda a fondo la biología del sistema y se aproveche esa biología para reducir los contaminantes en el flujo de residuos.

Los sistemas de lodos activados dependen de una combinación de procesos aeróbicos, facultativos y anaeróbicos para que los microorganismos puedan realizar su trabajo en los sistemas de aguas residuales. Los problemas típicos son la recuperación de la biomasa perdida, los problemas de espuma y sedimentación, y la acumulación de volumen de lodos.

Un problema inherente a cualquier sistema de tratamiento de aguas residuales en laguna es el costoso proceso de dragado mecánico, transporte y eliminación de los lodos para mantener la capacidad. También puede haber problemas de exceso de DBO y de olor. Nuestro método de biorremediación puede resolver estos problemas (incluso en invierno), ahorrando miles de dólares y manteniendo las lagunas en funcionamiento.